Proyecto de un piso familiar de 80 m2 cuadrados.
Nos encontramos ante un piso familiar de los 70, de unos 80 m2 cuadrados, donde vive una familia de cuatro miembros, matrimonio y dos hijos. Pasados los años, el piso ha quedado colmado por la vida de estas cuatro personas. Espacios mal aprovechados, muchas cosas a la vista, una distribución desactualizada y el envejecimiento del conjunto general. Es entonces cuando el piso necesita una actualización a nivel de decoración e interiorismo, redistribuirse y volver a amueblarse con el objetivo de envejecer con elegancia y evitar que la cotidianidad acabe superando nuevamente el diseño y concepto de la vivienda.
Todo el proyecto de interiorismo gira alrededor de la sala de estar y el comedor, una pieza doble conectada con la cocina por un lado, las habitaciones por otro y el conjunto de suite, baños y despacho por el otro. Sacar espacio de donde no hay a partir de la distribución, de conectar espacios y hacer emerger otros entre estas conexiones e interpenetraciones de materiales y espacios.
Como en muchos de nuestros proyectos de decoración e interiorismo, el diseño del mobiliario vuelve a ser el elemento clave para responder de la mejor manera posible al briefing que nos habían trasladado los clientes. Tonos, texturas y materiales pero sobretodo distribución y mobiliario como una pareja inseparable, como una dupla a pensar al mismo tiempo. Empezando por la mencionada conexión entre sala de estar, comedor y cocina, pasando por muebles que hacen emerger puntos de trabajo si se necesitan, pasillos, mesas extensibles, puertas correderas y el almacenaje justo a partir de la experiencia cotidiana: número de cajones, puertas, estantes, tomas de electricidad y soluciones para esconder todas las conexiones,
Casi todas las superficies y rincones de este piso familiar esconden funcionalidades. Nada es estandarizado, todo está pensado y fabricado al detalle. Ofreciendo calidez, sobriedad y elegancia pero también funcionalidad, calidad y atemporalidad.
Fotografías por: ©Sara Riera