Llegar a tu casa y reencontrarla en perfectas condiciones es un escenario idílico, pero también poco habitual para la mayoría de la población. O tenemos una disciplina inquebrantable que nos hace marchar de casa con todas las tareas hechas y todo en su sitio, o bien disponemos de alguien que limpia y ordena durante nuestra ausencia. En cualquiera de los casos, aunque mantener el orden impoluto en casa puede parecer una tarea compleja, es posible conseguirlo con las estrategias adecuadas y una planificación consciente. Por eso, te proponemos algunos trucos útiles para ayudarte a mantener el orden en tu hogar, tenerlo más organizado y potenciar su comodidad.

Cada objeto en su sitio

La clave para mantener el orden en casa es asignar un sitio específico para cada objeto. Esto te facilitará encontrar lo que necesitas rápidamente y te ayudará a que todo vuelva a sitio después de su uso. Piensa en la ropa sucia: tener una cesta específica en la que depositarla evita que se acumule en lugares inapropiados.

Utiliza contenedores y organizadores

Los contenedores y organizadores son aliados indispensables para mantener el orden. Desde cajas y cestas hasta separadores y bandejas, estos accesorios te permiten agrupar y clasificar tus pertenencias de forma eficiente. Un consejo es incorporar organizadores dentro de los cajones y armarios para que cada artículo tenga su propio sitio. De esta forma, evitarás el caos y facilitarás las rutinas diarias.

Aplica la norma de “uno entra, el otro sale”

La acumulación de objetos es uno de los principales enemigos del orden. Una estrategia efectiva es que, cada vez que incorpores una nueva adquisición dentro de tu casa, te deshagas de un objeto viejo o que ya no utilices. Esto te ayudará a mantener un equilibrio y evitará que el desorden predomine dentro de la vivienda.

Digitaliza documentos y fotografías

El papel es uno de los elementos que más desorden puede generar. Digitalizar documentos y fotos es un excelente recurso para reducir la cantidad de papel acumulado. Escanea y guarda digitalmente aquellos documentos importantes y fotos sentimentales, manteniendo sólo las copias físicas esenciales.

Haz del orden un hábito familiar

Es importante corresponsabilizar a toda la familia en la tarea de mantener el orden. Pero lo es aún más que se establezcan ciertos roles. El planteamiento idóneo, pues, es establecer un guion que estipule concretamente las tareas que debe realizar cada uno.

Si responsabilizamos a algunos de los miembros a realizar tareas específicas, conseguimos una mayor eficiencia. Por eso, está bien que un miembro de la familia asuma un rol de coordinador, para detectar si alguien no cumple adecuadamente sus funciones.

Maximiza el uso de las paredes

Las paredes ofrecen un espacio valioso que a menudo pasa por alto. Utiliza estanterías, perchas y paneles perforados para aprovechar al máximo el espacio vertical. Estos elementos facilitarán el acceso a los objetos que utilices con mayor frecuencia y te ayudarán a mantener el suelo desocupado.

Simplifica tu armario

Un armario apretado puede ser una fuente constante de estrés. Simplifica tu armario manteniendo sólo aquellas prendas que realmente utilizas y te gustan. Organiza la ropa por temporadas y utiliza cajas o bolsas como punto de almacenamiento fuera de temporada. De esta forma, siempre tendrás espacio suficiente para guardar la ropa de forma ordenada y acceder fácilmente a tus prendas favoritas.

Realiza limpiezas profundas regularmente

Aunque las limpiezas diarias son importantes, es fundamental llevar a cabo limpiezas profundas de forma regular. Dedica tiempo a limpiar y organizar áreas específicas de tu hogar que no atiendes a diario, como el garaje, el sótano o los armarios. Estos aseos te permitirán eliminar objetos innecesarios y mantener un ambiente limpio y ordenado en casa.

Use etiquetas en áreas de almacenamiento

Las etiquetas son una herramienta sencilla pero eficaz para mantener el orden. Etiqueta cajas, contenedores y estanterías para identificar rápidamente el contenido de cada uno. Esto te facilitará encontrar lo que necesitas y permitirá que todos los miembros del hogar devuelvan los objetos a su sitio correcto.

Mantiene las superficies despejadas

Las superficies despejadas contribuyen, en gran medida, a una sensación de orden y limpieza. Evita acumular objetos en mesas, mostradores y escritorios. Reserva estos espacios para las actividades diarias y devuélvelo todo a su sitio una vez hayas terminado.

Invierte en muebles multifuncionales

Te aconsejamos combinar opciones de almacenamiento abierto y cerrado en las que los objetos que queramos mostrar luzcan adecuadamente y todo lo que debemos almacenar, pero no queremos exponer, tenga su sitio asignado.

Organiza regularmente tu cocina

La cocina es uno de los núcleos de vida de cualquier hogar, y mantenerlo organizado puede ser un reto. Establece un sistema de organización para sus utensilios, electrodomésticos y alimentos. Utiliza contenedores transparentes para los alimentos y etiquetas para identificar su contenido. Dedica unos minutos cada semana a revisar y reorganizar tu cocina para asegurarte de que todo esté en su sitio.

Haz de la entrada un espacio ordenado

La entrada es la primera impresión que transmitirá tu hogar, y puede marcar la diferencia en cómo se percibe el orden general del resto de la vivienda. Teniendo en cuenta este factor, te recomendamos hacer uso de perchas, zapateros y cestas para mantener este espacio ordenado.

También puedes designar sitios específicos para las llaves, correos y otros objetos que suelen acumularse en la entrada. Un espacio de entrada limpio y organizado dará una sensación de orden desde el primer paso en tu hogar.

Revisa y deshazte de lo que no necesitas

Acumular objetos innecesarios es fácil, pero deshacerse de ellos puede ser liberador. Dedica tiempo a revisar tus pertenencias y deshazte de todo lo que no necesitas. Dona, recicla o tira aquellos objetos que ya no te sean útiles. Esta práctica libera espacio y le permitirá mantener un ambiente más ordenado y funcional.

Implementa soluciones de almacenamiento temporal

A menudo, el desorden surge por la falta de soluciones de almacenamiento temporal. Utiliza cajas y cestas para almacenar temporalmente objetos que no tienen un sitio definido. Estas soluciones pueden resultar especialmente útiles durante mudanzas, renovaciones o cambios estacionales. Asegúrate también de revisar y reorganizar estos espacios temporales regularmente para evitar que se conviertan en puntos permanentes de desorden.

Mantener el orden en cada rincón del hogar requiere esfuerzo, dedicación, constancia y colaboración, pero con las estrategias indicadas es posible conseguirlo.

En Coblonal, entendemos la importancia de que tu hogar sea un entorno limpio y organizado, para preservar tu bienestar y garantizar la funcionalidad dentro de tu casa. Y es que seguro que si sigues con todo detalle estos consejos, disfrutarás de un espacio armonioso, limpio, equilibrado y ordenado.

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