Diseño de escaleras de interiores de casas modernas

Es el tipo de escalera que más se utiliza en los proyectos de interiorismo. Son escaleras dispuestas en dirección recta ascendente y son las más populares gracias a su sencillez y posibilidades estéticas.

Este tipo de escalera se caracteriza por su media vuelta con dos rellanos, en los que cada uno de ellos tiene un giro de 90º. También se la conoce como escala de doble «L».

Este tipo de escalera, con forma de letra “L” al verse en la planta, es una escalera formada por dos tramos rectos conectados por un rellano intermedio, formando un ángulo recto. También se llama “escalera de un cuarto de vuelta”.

Se trata de una escalera que hace una curva amplia para permitir que el usuario suba al nivel superior. A menudo está ubicada en una pared curva. Morfológicamente, es una de las escaleras más atractivas a nivel estético, gracias a su forma característica de elipse. Además, una de las grandes ventajas de esta tipología de escala es que permite aprovechar y optimizar el espacio, puesto que ocupan poco.

Consiste en una escalera que gira en torno a un palo central. El más común es un polo central recto con pasos que irradian. También las hay con estilo de hélice con un soporte central curvo.

Las escaleras, además de su dimensión plástica, también pueden concebirse como un elemento casi escultórico, como una pieza más de arte en casa. Un claro ejemplo son las escaleras con escalones volados. Son una opción minimalista y con una presentación espectacular: en estas construcciones se ven los escalones con una barandilla finísima, o incluso sin barandilla. Los escalones se pueden empotrar en una de las paredes o sostenerse sobre un eje central, quedando ambos lados suspendidos.

Ya sean de madera, de piedra o porcelánico, en función del estilo que tenga tu casa, puedes optar por una escalera con escalones de uno u otro material. Los más habituales son los peldaños de baldosas, piedra natural o madera, o una combinación de estos materiales.

En Coblonal, apostamos por utilizar la chapa de hierro negra doblada como recurso para dibujar el perfil completo de una escalera. Además, también puede ir apoyada en una estructura que deje espacio hábil debajo, o recubriendo escalones de obra. La opción de recubrir la construcción con microcemento aporta una imagen de continuidad con la solidez de la construcción.

La escala, aunque se considere un “no lugar” ya que se concibe como un espacio de paso, puede a la vez representar un papel estético central en la concepción decorativa del espacio. A lo largo de nuestra trayectoria, y como principio básico, consideramos que los lugares de paso no tienen por qué estar reñidos con la belleza.

Y es que los tipos de materiales a emplear en el momento de plantear una escalera permiten personalizarlas hasta conseguir que un simple elemento de paso y conexión sea una pieza emblemática del espacio tanto por su impacto estético como por las posibilidades que genera.

En cualquier proyecto de interiorismo, conseguirás un estilo u otro en función de los materiales que utilices para diseñar tu escalera: ya sea de hormigón, de microcemento, de piedra, con espejos, vidrio, madera, acero… Cualquiera de estos materiales dotarán a tu escalera de su propio estilo característico. 

Del diseño de las escaleras suele ocuparse un/a profesional de la arquitectura o el interiorismo, pero cualquier usuario puede llegar a construir una escalera si lo desea.

Para ello será vital seguir unos pasos primordiales: calcular las dimensiones de tu futura escala, las huellas, las contrahuellas y los descansos.

Conociendo la altura y el espacio disponible para la escalera, basta con utilizar la Ley de Bondel para calcular la huella, la contrahuella y la cantidad de escalones. Esta metodología es una herramienta útil para saber cuáles deben ser las dimensiones adecuadas de una escalera, garantizando comodidad y seguridad en su uso.

Según la Ley de Bondel, se establecen las siguientes relaciones para determinar las dimensiones clave de una escalera:

• Contrahuella (h): la altura total de la escalera se divide por 18.
• Huella (g): se obtiene multiplicando la altura de la contrahuella por 12.
• Cantidad de escalones (n): la altura total de la escalera se divide por la contrahuella.

Utilizar la Ley de Bondel asegura que las proporciones de la escalera sean ergonómicas y funcionales, evitando escalones demasiado altos o demasiado profundos, y garantizando una experiencia de paso segura y cómoda. Es importante tener en cuenta estas directrices durante el diseño de una escalera interior moderna para optimizar su rendimiento y estética.

Como verás, existe una gran variedad de opciones para que las escaleras se conviertan en un elemento decorativo más dentro de tu hogar. Todo va a depender de tu visión y necesidades particulares.

Si te estás planteando reformular las escaleras de tu casa, no dudes en ponerte en contacto con nuestro estudio para solicitar asesoramiento personalizado, o bien echar un vistazo a nuestros proyectos y redes sociales para inspirarte.